Gïk Live: el vino azul

Cinco veinteañeros han lanzado Gïk Live, un vino con un color azul índigo y un sabor dulce muy agradable pero... ¿cómo lo han elaborado?

El vino es una materia prima muy compleja. Tiene un pH muy ácido y el proceso de fermentación no es precisamente sencillo. Por eso, han desarrollado un proceso tecnológico de pigmentación y edulcoración alimentaria que combina pigmentos naturales y procesos químicos de sintetización.

Estos chicos se preguntaron cómo hace la naturaleza para que las fresas sean rojas y, de esta forma, decidieron volver al origen y mezclar naturaleza y tecnología en un proceso tecnológico cuyo resultado es un vino perfectamente sano, de color azul y con un sabor dulce.




SOBRE EL SABOR

Gïk no lleva azúcares añadidos. ¿Por qué? En primer lugar, porque el azúcar fermenta y se convierte en alcohol dentro de la botella.

En segundo lugar, porque el exceso de azúcares genera sobrepeso, mientras que los edulcorantes son una alternativa más saludable y light.

Todos los procesos están regulados por la European Food Safety Authority y han recibido la aprobación de las instituciones que evalúan de manera continua la seguridad y sus condiciones de uso.

SOBRE EL COLOR

Entre los compuestos de pigmentación empleados están la antocianina, un compuesto natural procedente de la piel de la uva, y la indigotina. Ambos son pigmentos orgánicos obtenidos por sintetización.

Esta tecnología ha sido desarrollada por el equipo de I+D de Gïk en colaboración con la Facultad de Ingeniería de la UPV-EHU y empresas del sector de la tecnología agroalimentaria.

Los controles de calidad son rigurosos y todos los elementos utilizados siguen la normativa para productos alimentarios de la Unión Europea.




EL PROCESO

1) Se mezclan uvas tintas y blancas
2) Se añade un pigmento de la uva: antocianina
3) Se añade otro pigmento: azul índigo
4) Para terminar, se añade edulcorantes alimentarios no calóricos

LA PRODUCCIÓN



Información obtenida de http://gik.blue/